martes, 19 de febrero de 2008

¿Publicidad hipertextual?

La hipertextualidad, como un modelo nuevo de narrar se impone en todos los géneros discursivos. Con la era de Internet, la red se colma de todo tipo de muestras narratológicas y si éstas implican un movimiento de capital, pues mejor. Con esta confluencia se habla de una publicidad interactiva, donde el receptor del mensaje no es un mero agente pasivo si no que dentro de una actitud sanamente pueril, se puede jugar mientras estás formando parte del acto comunicativo. Si aceptamos que uno de los primeros pasos del discurso publicitario es la implicación del receptor, entonces la publicidad interactiva es perfecta para este postulado. Así tenemos juegos en apariencia que no dejan de ser anuncios encubiertos en una página web, porque no nos engañemos, si estamos jugando a una versión del clásico videojuego Tetris, donde los ladrillos son latas de cerveza Estrella Galicia… lo que estamos es participando en un acto publicitario, estamos reconociendo la marca de cerveza como algo positivo e incluso entretenido. Hasta aquí nada exige pensar ni comprometerte, porque la simplicidad del juego o del mensaje es lo que hace que el receptor pierda unos segundos en hacerte caso. Pero, cuando el propio anuncio tiene un argumento, tiene una historia, tiene un “Discurso” enviamos el concepto de publicidad a un segundo plano y nos metemos de lleno en esa historia como si estuviéramos absorbidos por un videojuego, donde jugamos a ser un personaje ajeno a nuestra persona y podemos escoger nuestras opciones en la aventura. Este ejemplo se puede ilustrar con la campaña de bebida Ron Cacique www.escuchalallamada.com . La sustancia de este anuncio es la de cualquiera en una campaña: Promoción de marca, información de actividades relacionadas con el producto, regalos y aumento de una base de datos para poder enviar información a consumidores potenciales (mailing), pero la forma varía sustancialmente porque está ambientada como un videojuego donde somos un personaje protagonista (propio del discurso publicitario, la estimación positiva del receptor del mensaje) y nos metemos en una ciudad de ambiente nocturno en locales exclusivos (más adulación hacia el receptor) donde todo apunta a que el receptor tipo es un varón mayor de edad con prestigio social al que le van preguntando datos personales de manera indirecta (edad, dirección, correo electrónico…).
Existe un discurso y una falsa sensación de elección en todo momento (falsa porque las opciones son limitadas) el final es aparente, porque (y aquí puede verse un ápice de genialidad en la promoción) cuando todo termina en el videojuego o anuncio hipertextual, te informan de fiestas reales en ciudades cercanas a donde tú vives para continuar con la historia del videojuego… con lo cual el salto del mundo real al virtual está presente… y hasta me dan ganas de tomar un cacique 500.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Aquí vai outro enderezo vencellado coa publiciade:
Redefinición de las estructuras narrativas publicitarias
http://www.ucm.es/info/multidoc/multidoc/revista/cuad6-7/imoreno.htm

oscarhipertext dijo...

Cacique se pasa con esta publicidad. Es excesivamente larga. Claro! Seguro que el regalo del iPod es apetitoso y entonces aprovecha que el espectador esperará para conseguir el regalo. Y mientras tanto, venga publicidad. Es interactivo, pero no un hipertexto. Simplemente te hace unas preguntas para seguir un camino que está establecido desde un principio. Ni tan siquiera se acerca a la definición de lo que puede ser un videojuego desde el punto de vista de un hipertexto.
Muy bonito, pero es una especie de videoclip con una serie de elementos que permiten que interactúes.